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domingo, 16 de junio de 2024

Por qué al hacernos mayores tenemos que centrarnos en ganar músculo más que en perder peso

Por Giulia Granchi

BBC News Brasil, São Paulo

 

En un video que llegó a millones de personas en las redes sociales, una señora que parece tener más de 70 años levanta una barra con pesas en el gimnasio. La siguiente imagen es de ella haciendo lo mismo, pero con la compra en el supermercado.

El mensaje del video coincide con el que la doctora estadounidense Gabrielle Lyon intenta transmitir a sus pacientes desde hace años: para envejecer bien y tener calidad de vida en la vejez, es necesario desarrollar y mantener la musculatura.

"Tal vez no nos preocupe tanto llevar bikini, pero sí el ser autónomos, tener fuerza para sostener a nuestros nietos. Llevar nuestra propia compra, vivir de forma independiente, ese es el primer motivo para preocuparnos por mantener una buena masa muscular", afirma la geriatra, autora del libro "La revolución muscular", publicado por la editorial Intrínseca en marzo.

"Pero va mucho más allá. Mantener la masa muscular ayuda a prevenir enfermedades crónicas como la obesidad, la diabetes tipo 2, la hipertensión, enfermedades cardiovasculares... Condiciones que se vuelven más comunes a medida que las personas envejecen".

"Realmente existe esta transición con la edad, donde nos preocupamos menos por nuestro físico. Cuando somos jóvenes, nos enfocamos en la apariencia, y eso está bien, porque eso crea buenos hábitos.

"Pero hay una diferencia: no siempre se trata solo de estética. Y, de hecho, nunca es demasiado tarde para fortalecerse y ganar músculo".

Un proceso natural con la Edad 

El proceso natural de pérdida progresiva de masa y fuerza muscular comienza a producirse, aunque lentamente, a partir de los 30 años.

Cuando llegamos a los 50 comienza una pérdida de masa muscular más importante, que puede llegar al 2% anual.

Pero algunos factores, como el sedentarismo, una dieta baja en proteínas, las enfermedades crónicas y la hospitalización pueden hacer que este descenso comience antes.

Esta importante pérdida de músculo, conocida como sarcopenia, puede provocar una disminución de la capacidad funcional, un mayor riesgo de caídas y discapacidad.

"A menudo, el músculo perdido se reemplaza por grasa corporal, lo que reduce la fuerza y la movilidad muscular y altera el metabolismo", describe Lyon.

La médica señala que, en la última década, gran parte de las investigaciones, así como las campañas de concientización, se centraron mucho en la obesidad y la necesidad de perder peso.

"Esto ha dañado la forma en que la gente piensa sobre el fitness. Cuando envejecemos, la falta de músculo puede causar más daño que la cantidad de grasa en el cuerpo", dice.

Y para aquellos que consiguen mantener un buen aporte de masa muscular, explica, la quema de grasas también se potencia, ya que los músculos gastan más energía en reposo que otros tejidos.

 

Un Protector frente a las enfermedades 

Una buena masa muscular ayuda a evitar diferentes problemas de salud.

Ejemplos de enfermedades que la masa muscular puede ayudar a prevenir incluyen:

Diabetes tipo 2

Esta enfermedad hace que el cuerpo no utilice adecuadamente la insulina, una sustancia producida por el páncreas que ayuda a regular el azúcar en sangre, así que justamente provoca que los niveles de azúcar suban.

Un cuerpo con más músculos necesita más energía para mantenerlos funcionando y, por lo tanto, utiliza más azúcar para transformarla en energía.

Así, la masa muscular ayuda a regular de manera más eficiente el azúcar en la sangre, ayudando tanto a prevenir la diabetes tipo 2 como a regular la condición de quienes padecen la enfermedad.

Enfermedades cardíacas

Los ejercicios de fuerza hacen que el corazón necesite trabajar más para bombear sangre a los músculos.

El esfuerzo adicional ayuda a fortalecer el órgano, lo que reduce el riesgo de enfermedades cardíacas.

Osteoporosis

Durante ejercicios como levantar pesas, los músculos se contraen y ejercen fuerza sobre los huesos a través de los tendones.

Este movimiento estimula la remodelación ósea, lo que hace que los huesos sean más densos, algo que ayuda a prevenir la osteoporosis, una afección en la que se vuelven quebradizos y propensos a fracturas.

 

Cómo ganar masa muscular 

En opinión de Lyon, el sistema musculoesquelético es el órgano del cuerpo más subestimado, especialmente cuando se trata de personas mayores.

"Cuando seas mayor, si comes y entrenas como lo hacías cuando eras más joven, es posible que no puedas mantener tu salud muscular. Debes concentrarte en esto y planificar una rutina que te funcione".

Lyon sostiene que entrenar para ganar músculo de modo eficaz no tiene por qué ser complicado.

"No hay ejercicios ni movimientos específicos que sean cruciales. La idea es estimular contínuamente el tejido muscular. Y hay muchas maneras de hacerlo".

Una gran cantidad de estudios científicos sugiere que, para la hipertrofia (ganancia muscular), un método muy eficaz es el denominado "fallo muscular"; es decir, llegar al máximo de la capacidad muscular con el máximo esfuerzo en ejercicios de entrenamiento con pesas convencionales de manera que en una serie de un ejercicio determinado llegue un punto que resulte imposible hacer una repetición más.

Esto no significa necesariamente que la persona tenga que levantar cargas muy pesadas o hacer un número muy elevado de repeticiones, sino que haga un esfuerzo dentro de su condición física actual.

Para quienes están dando su primer paso para salir del sedentarismo, deben incluir el ejercicio en su rutina de modo gradual.

"Lleva una mochila u objetos más pesados que tengas en casa, piensa en actividades que impliquen levantar algo por encima de tu cabeza... Esto te ayuda a entender la importancia de mantener el equilibrio y la fuerza muscular y, especialmente, la importancia de la fuerza en las piernas. No necesitas hacer sentadillas con el máximo peso, pero sí ser capaz de levantarte del suelo", explica Lyon.

Se recomienda el acompañamiento con un profesional de educación física para poder alinear un plan que sea eficaz para el objetivo -y es aún más importante en el caso de personas mayores y sedentarias, para evitar lesiones y caídas durante el ejercicio.

Otra medida imprescindible para ganar masa muscular es una dieta equilibrada con especial foco en las proteínas.

Según la Sociedad Internacional de Nutrición y Deporte, para el crecimiento muscular y el mantenimiento de la masa magra, junto con el ejercicio físico, es necesario un aporte diario de entre 1,4 y 2,0 gramos de proteína por kilo de peso.

Por tanto, una persona que pese 70 kilos necesitaría consumir entre 98 y 140 gramos de proteína al día.

 

Nunca es demasiado tarde 

Lyon sostiene que siempre es un buen momento para empezar a entrenar.

"Lo que quiero decir con esto es que la actividad física debería ser una forma de vida. Soy madre de dos niños pequeños y ya hacemos ejercicio en familia, por supuesto. En el caso de ellos, de una manera adaptada a los niños. Se entrena desde una edad temprana, esto prepara el músculo para estar más saludable en el futuro".

Pero incluso para alguien que entrena desde pequeño y de forma constante, la médica admite que perder masa muscular sigue siendo bastante fácil.

"En una semana de inactividad, ya vemos pérdidas importantes. Esto queda muy claro cuando analizamos a las personas que ingresaron en la UCI, por ejemplo".

Por otro lado, más optimista, Lyon explica que los músculos tienen un tipo de memoria.

"Es mucho más fácil volver a estar en forma que empezar desde cero. Si empiezas joven, aún mejor".

Pero explica que esto no debería asustar a nadie que vaya a empezar a hacer ejercicio cuando sea mayor: es posible conseguir buenos resultados a cualquier edad, y una dieta equilibrada y un entrenamiento centrado en las características personales sólo pueden aportar beneficios.

"El cuerpo depende de la actividad. Fuimos creados para ser criaturas activas y, cuando reducimos la actividad física, corremos el riesgo de sufrir discapacidades físicas".

La médica sostiene que, a medida que envejecemos, debemos volvernos más activos, no menos.

"La inactividad no es una opción para una persona sana. Cuanta más masa muscular saludable tengas, mayor será tu capacidad para sobrevivir contra todo tipo de enfermedades, ya sea cáncer, caídas o cualquier otra cosa. Y tendrás mayor capacidad para ser autónomo y sobrevivir. No hay nada más importante para la población mayor que tener músculos".

Y para aquellos que buscan salir del sedentarismo, Lyon tiene algunos consejos:

"No esperes motivación ni dependas de objetivos concretos. Lo más importante es pensar que los años que te quedan se pueden cambiar si tomas buenas decisiones por ti mismo".

 

Fuente:

Ganar músculo 

 

viernes, 14 de agosto de 2020

¿Cómo evitar que el cerebro envejezca demasiado rápido?

Por



El cerebro es un órgano que, al igual que el resto de nuestro cuerpo, envejece con el paso de los años. 

Si todos deseamos mantenernos más jóvenes no es solo porque nos disgusten las arrugas, sino también para evitar las múltiples enfermedades relacionadas con el envejecimiento.
Las previsiones indican que en el año 2050 un 25% de la población europea tendrá más de 65 años y el número de personas con más de 80 años se va a triplicar. 

Pero ¿existe una fuente de la juventud para nuestro cerebro? 

Aunque posiblemente nada nos haga retroceder en el tiempo, podemos intentar envejecer de manera saludable y reducir el efecto que tiene el paso de los años.

¿Qué es el Envejecimiento? 

El envejecimiento podría definirse como el conjunto de cambios que ocurren con la edad y provocan una disminución de nuestras capacidades fisiológicas, motoras y cognitivas.

El primario es gradual e inevitable y se produce a lo largo de nuestra vida. 

El secundario o prematuro viene desencadenado por el padecimiento de ciertas enfermedades o el abuso de sustancias, y se puede prevenir.

 La edad cronológica (la del certificado de nacimiento) indica el tiempo que ha transcurrido desde nuestro nacimiento. 

Sin embargo, existe también la edad fisiológica, que depende de la condición de nuestro organismo y puede ser menor a la cronológica (si nos cuidamos) o mayor (si tenemos malos hábitos).

El Envejecimiento del Cerebro 

Con la edad, el tamaño del cerebro disminuye, perdemos neuronas y se altera la producción de hormonas y neurotransmisores.

Sin embargo, el cambio más importante que se produce es la pérdida de muchas de las conexiones entre las neuronas, unas células de larga vida que no se dividen y, por lo tanto, difícilmente se regeneran.

Otra consecuencia del envejecimiento cerebral es la acumulación de proteínas en forma de agregados que tienden a depositarse tanto dentro como fuera de las neuronas.

Esto puede desencadenar el desarrollo de enfermedades neurodegenerativas relacionadas con la edad, como la enfermedad de Alzheimer o el Parkinson.

Conviene aclarar que lo que comúnmente se denomina como demencia senil es un término obsoleto. El envejecimiento no implica necesariamente la aparición de una demencia o pérdida importante de memoria. 

Si existe una pérdida significativa de la capacidad de memoria y aprendizaje, estaría relacionada con una enfermedad específica y no con el envejecimiento normal del cerebro.

Medidas para Frenar el Envejecimiento

La dieta es esencial para envejecer de forma saludable. 

La más recomendada es la mediterránea, que brevemente implica un bajo consumo de carnes y aves de corral, un consumo de bajo a moderado de lácteos, una cantidad moderada de alcohol (vino) y grasas (aceite de oliva), y una alta ingesta de verduras, legumbres, frutas, cereales y pescado.

Se ha comprobado que la dieta mediterránea reduce el riesgo de padecer fallos cognitivos y enfermedades como el alzhéimer. 

Además, la restricción calórica o limitación de las calorías que ingerimos puede ayudar a retrasar el envejecimiento.

Además de cuidar lo que comemos, es recomendable dormir ocho horas al día. 

El mantenimiento de un buen ciclo vigilia-sueño es esencial para muchas funciones cerebrales, por ejemplo para la eliminación de las toxinas del cerebro que se han acumulado durante el día.

Mientras dormimos, el espacio que existe entre las neuronas aumenta, facilitando su limpieza y buen funcionamiento. Por lo tanto, mantener un sueño reparador favorece un envejecimiento más saludable.

El ejercicio regular y la actividad física son claves para disminuir los efectos del envejecimiento. 

Estudios clínicos indican que el entrenamiento físico con intensidad moderada juega un papel neuroprotector, ralentizando la disminución del volumen del cerebro y mejorando su funcionamiento. 

Concretamente, el ejercicio aeróbico mejora la función cognitiva, no sólo durante el envejecimiento sino también en personas que sufren enfermedades neurodegenerativas.

Por otra parte, se ha comprobado que aquellas personas que poseen un nivel educativo más alto o que mantienen una cierta actividad intelectual -leer, estudiar o adquirir nuevas habilidades- tienen una menor predisposición a desarrollar demencia. 

La base de esta neuroprotección está asociada a la formación de nuevas conexiones entre las neuronas.

Otros hábitos saludables también pueden ayudarnos a evitar los efectos del envejecimiento prematuro. 

Sin ir más lejos, mientras que una ingesta abundante de alcohol corre el riesgo de inducir fallos cognitivos, otras bebidas alcohólicas pueden ser beneficiosas para mantener una buena salud mental .

El vino, por ejemplo, tiene un alto contenido en polifenoles, que tienen acción antinflamatoria y antioxidante.

Definitivamente, el tabaco es un hábito que se debe evitar, ya que se ha relacionado con la aceleración del envejecimiento y la aparición de problemas cognitivos y demencia.

Tampoco hay que perder de vista los factores de riesgos relacionados con enfermedades crónicas altamente prevalentes en personas de avanzada edad. 

El mantenimiento de la actividad e integridad del cerebro dependen, en buena parte, de los vasos sanguíneos que mantienen una buena irrigación. 

La hipertensión, la aterosclerosis y los niveles elevados de colesterol incrementan las posibilidades de desarrollar fallos cognitivos, ictus y demencia.

A esto se suma que la diabetes y la obesidad afectan al metabolismo de la glucosa y generan resistencia a la insulina. 

Ambas alteraciones podrían provocar daños crónicos a las neuronas y acelerar el envejecimiento cerebral.

Los trastornos del estado de ánimo tampoco ayudan.

La depresión es un desorden emocional muy común en personas mayores y es producida por un desequilibrio en los neurotransmisores, que son las moléculas que usan las neuronas para comunicarse. 

Este desajuste podría traducirse en un mal funcionamiento del cerebro a largo plazo, lo que aceleraría el envejecimiento cerebral.

En síntesis, la clave para mantener un cerebro sano y joven es la misma que para el resto del organismo. 

Es decir, hay que mantener una dieta sana, dormir las horas suficientes, evitar el consumo en exceso de alcohol, huir del tabaco y el estrés, realizar ejercicio moderado, y evitar el desarrollo de otras enfermedades o, al menos, mantenerlas bajo control.

*Inés Moreno González. Profesora e Investigadora Ramón y Cajal en Enfermedades Neurodegenerativas, CIBERNED, IBIMA, Universidad de Málaga. 


Fuente:

martes, 23 de mayo de 2017

Entrenando conforme a tu personalidad: El sistema de Neuro tipo

Por Christian Thibaudeau

Por qué tu rutina de entrenamiento no funciona

¿Has terminado alguna vez un programa de entrenamiento sin ver resultados? ¿Era una rutina inteligente diseñada por un respetado entrenador? ¿Tus amigos hicieron la rutina y obtuvieron grandes resultados pero tú no?

¿Alguna vez te has visto forzado a completar un plan de entrenamiento porque simplemente no te motivaba? Quizás hasta te sentiste culpable por ello. O quizás no viste ningún beneficio, sino que asumiste que era debido a tu “mala genética”. ¿O pensaste que el programa simplemente era malo, a pesar de que a otras personas parecía encantarle?

Esto es algo común. Y el problema no es el programa, tu ética de trabajo, o tu genética. El problema es que el programa de entranamiento no encajaba con tu perfil psicológico y neurológico, es decir, con tu tipo de personalidad.

Esto no es psicología popular sin valor. Tu perfil de personalidad está genéticamente deteerminado por el equilibrio de tus neurotransmisores. Y tus neurotransmisores lo controlan todo.

El sistema nervioso es el jefe

El sistema nervioso es el responsable del reclutamiento de tus fibras musculares, determina cúantas fibras puedes estimular para que crezcan. También es responsable de la coordinación y ejecución de los levantamientos grandes.

Eso lo sabes, pero he aquí algo que puede que no sepas: tu sistema nervioso también es el centro de control de la motivación. Incluso juego un gran papel en tu respuesta al estrés, y a cuanta energía, enfoque, y capacidad de trabajo tienes en una sesión de entrenamiento.

La clave para el éxito en el entrenamiento es simplemente esta: entrenar duro y de manera enfocada. Y eso no se puede hacer durante mucho tiempo si no estás motivado por tu plan de entrenamiento. Y para estar motivado por tu programa de entrenamiento, tiene que encajar con tu perfil neurológico. Entrenar tomando ventaja de tu naturaleza neurológica también hará que te sientas mejor en general, y te hará alguien más productivo en otros aspectos de la vida.

El equilibrio de los neurotransmisores y tu personalidad 

Tu personalidad te da pistas acerca del equilibrio de tus neurotransmisores, de cuales neurotransmisores están altos y cuales bajos. Tu comportamiento se ve fuertemente influenciado por esos niveles, ya sea que seas consciente o no.

Es por eso que evaluo el perfil de personalidad de cada culturista, atleta, o crosfitero que entreno. Esta evaluación me da una idea muy buena de su equilibrio de neurotransmisores. Luego utilizo esa información para planear su entrenamiento de acuerdo a ello.

Si el entrenamiento no encaja bien con tu tipo de perfil, puede generar fatiga, caídas en la motivación, y una respuesta al estrés más alta, incluso conduciendo a lesiones. Y, desde luego, lleva a una falta de progreso. Es por eso que puedes estar en “la mejor rutina del mundo” y no conseguir resultados. Para tener resultados óptimos, debes entrenar bien de acuerdo a tu tipo.

En el sistema de neurotipos, explicaré los tres tipos de personalidad principales, qué neurotransmisores están altos para cada uno de ellos, y cómo eso debería influenciar tu entrenamiento, nutrición, y elección de suplementos.

Los 3 neuro tipos

He experimentado con varios tests de personalidad y valoraciones a lo largo de los años. También he consultado con psicólogos y otros expertos para hallar el mejor método. El Inventario de temperamento y carácter Cloninger (TCI) es el más ampliamente aceptado en la comunidad científica, y lo he probado en cientos de levantadores y atletas.

El TCI es un inventario para características de la personalidad basado en un modelo psicobiológico. Dicho de manera simple, la gente tiene distintos tipos de personalidad porque tienen distintos niveles genéticos de ciertos neurotransmisores: dopamina, serotonina, y norepinefrina. Cuando los científicos midieron los niveles de neurotransmisores y los compararon con los tipos de personalidad, encontraron que, de hecho, coincidían.

Existen tres tipos principales de perfiles:

Tipo 1: Este tipo tiene bajos niveles de dopamina, así que él o ella busca la novedad, o nuevas cosas para estimular su nivel de dopamina, que es bajo de manera natural. Son, en cierto modo, adictos a la adrenalina. En psicobiología, lo llaman el tipo que busca novedades.

Tipo 2: Estos tipos tienen niveles bajos de norepinefrina. Como este neurotransmisor se asocia con la confianza y un sentimiento de bienestar, estas personas buscan recompensas para aumentar sus niveles de norepinefrina. Desde respuestas sociales (como ser alguien que agrada a las personas) a lograr objetivos. En la ciencia se le llama tipo dependiente de la recompensa.

Tipo 3: Este tipo se asocia con una serotonina baja. No les gusta el cambio, sino que les gusta dominar una actividad repetitiva. “Los fanáticos de la técnica” encajan con este perfil. En psicobiología, llaman a este tipo “el que evita riesgos”.

No tienes que hacer una prueba formal para tener una buena idea de que tipo eres. Abajo tienes un desglose de los mismos.


Tipo 1: El buscador de novedades

Este tipo se asocia con una baja actividad de la dopamina. Eso significa que la toma de decisiones está dominada en su mayor parte por la necesidad de aumentar la dopamina. La dopamina base es baja y los receptores son sensibles. Bajo las circunstancias correctas, estos receptores pueden producir emisiones de dopamina.

Como los receptores son tan sensibles, te puedes convertir en “adicto”. Estás siempre buscando un emisión fuerte de dopamina. Si estás en esta categoría, necesitas emociones y actividades altas en adrenalina. También te aburres con facilidad, eres de naturaleza curiosa, y puede que tengas un temperamento irritable.


Este tipo requiere una variedad de estímulos y desafíos. Se ven atraídos de manera natural por actividades no repetitivas. Se aburren con eventos repetitivos como el entrenamiento de resistencia o rutinas de levantamiento que se repiten una y otra vez. No son buenos en competiciones de resistencia, más que todo debido al aburrimiento, pero también porque tienden a tener altos niveles en serotonina. Cuando los niveles de dopamina son proporcionalmente más bajos que los de serotonina, la capacidad de trabajo disminuye.
Los buscadores de novedades son extrovertidos y se manejan bien en situaciones sociales. Son también muy competitivos. Les gustan los desafíos y les encanta aprender habilidades nuevas. Este tipo se emociona por aprender un ejercicio o levantamiento nuevo, incluso si es difícil para ellos. Es “nuevo” y estimulante, y eso es todo lo que importa.

Deportes 

Cuando se trata de deportes, se ven más atraídos por deportes extremos, deportes de contacto como el fútbol americano y los deportes de lucha. Lo hacen muy bien en deportes individuales, especialmente los que son de corta duración (esprints, lanzamientos, saltos, etc.)

Levantamiento 

Se sienten más atraídos por deportes de rendimiento que en competiciones físicas como el culturismo. Son los que se convierten en buenos atletas de crossfit. Los powerlifters de elite pueden también entrar en esta categoría, especialmente aquellos que se ven atraídos de forma natural por el sistema de entrenamiento Westside, que contiene un montón de variedad.

Dieta

Les va bien con una dieta baja en carbohidratos, normalmente tomando carbos solo alrededor de los entrenamientos, pero necesitan rellenar con más frecuencia, cada tercer o cuarto día. A estos tipos también les va bien con un consumo de proteína más alto.


Tipo 2: El dependiente de las recompensas

Este tipo se asocia con niveles bajos de norepinefrina. Este neurotransmisor, junto con la motivación, crea un sentimiento de bienestar general y confianza. Niveles bajos de norepinefrina llevan a un estado depresivo, falta de ánimo, y baja motivación. Para contrarestar esto, este tipo de perfil busca “recompensas” que aumenten los niveles de norepinefrina, pero esto puede hacer que tengan un riesgo alto de adicción.

Son los típicos que les gusta “agradar a las personas”, cuya autoestima está basada en cómo otros los perciben. Para estos individuos es muy importante gustar, ser respetados, e incluso admirados.

Están listos para hacerlo bien en situaciones sociales porque necesitan sentirse apreciados. Son sociables, empáticoos, y tienen una gran sensibilidad a las pistas sociales que les ayuda a hacer amigos, los cuales necesitan. Se preocupan de verdad por otros. Pero debido a su afecto por otros y el deseo de agradarles, es fácil aprovecharse de ellos.

Este tipo de personalidad hará lo que sea por ayudar a otros, incluso privándose de cosas ellos mismos. Están motivados por querer verse bien a ojos de otros y por gustar a la gente. Nada es para ellos peor que desagradar a alguien. Debido a esta actitud, llegarán a grandes extremos para alcanzar sus metas.

Deportes

Tienden a ahogarse en eventos individuales, porque ponen mucha presión sobre ellos mismos. Al ser así, rara vez lo hacen bien en deportes individuales, pero lo hacen genial como parte de un equipo. Rara vez son las “superestrellas” pero están dispuestos a hacer lo que sea por ayudar al equipo y ganar respeto.

Levantamiento

Se ven atraídos por el culturismo y los deportes de físico porque “verse increíble” es una forma de ganar la admiración de otros y construir autoestima. Sin embargo, cuando se trata de competiciones (culturismo, figura, etc.) pueden tenerlo muy difícil a la hora de llegar al pico de forma debido a que el estrés de sentirse juzgados puede elevar sus niveles de cortisol, lo cual aumenta la retención de líquidos y hace que sea más difícil llenar los músculos con glucógeno.

Dieta 

Normalmente son buenos cumpliendo con una dieta si se les hace responsables. Lo hacen bien porque quieren agradar a su entrenador. Pero a causa de que la caomida puede verse como una recompensa, pueden convertirse en adictos a las comidas trampa. Son gente que deben prohibir la “mala” comida en sus dietas y hacer recargas solo con comidas que ya se encuentran en su dieta regular.


Tipo 3: El que evita daños

La evitación de daños se asocia con un bajo nivel de serotonina, lo cual afecta a la forma de actuar y sentir. La baja serotonina pueda hacer que te canses más fácilmente o tengas un bajo nivel de energía. Si encajas con este perfil, querrás evitar situaciones desagradables, castigos, y conflictos, mucho más de lo que lo hacen otras personas. Estás más cómodo con situaciones familiares que puedes controlar.

Estas personas tienden a ser más tímidas e introvertidas. Tienen una alta vulnerabilidad a la crítica, e incluso las críticas constructivas les generan ansiedad. Su nivel más alto de ansiedad general los lleva a producir más cortisol de la cuenta, lo cual afecta negativamente a sus ganancias de músculo.

Los cambios de planes inesperados les molestan sobremanera y les producen una alta respuesta al estrés. Son planificadores cuidadosos, especialmente cuando una situación representa un riesgo o daño potencial. Debido a esto, son muy organizados. Pero bajo estrés pueden sentirse inhibidos por la ansiedad, lo cual les lleva a la procastinación o a que les sea difícil tomar decisiones.

La fuerza que dirige a los evitadores de daños es alejarse del estrés y las lesiones. Cuando se trata del entrenamiento, eso les hace sentirse atraídos por actividades más repetitivas que ya han dominado. Al contrario que el que busca novedades, a este tipo no le gusta la variedad y las cosas nuevas en el gimnasio. Se estresan cuando aprenden un nuevo levantamiento, por ejemplo.

Pero se enfocan muy bien cuando entrenan. Son perfeccionistas y a menudo “expertos en técnica”. Sin embargo, tienden a ser más conservadores con su selección de pesos. Son muy buenos en ceñirse a un plan, a veces rozando el transtorno obsesivo compulsivo en el entrenamiento.

Deportes

Este tipo se ve más atraído por deportes en los que sucedan pocas cosas que no pueden predecirse, y que tengan un menor factor de riesgo. No les gustan los deportes de contacto, en los que sucesos aleatorios forman una parte importante del juego.

Levantamiento 

Lo hacen mejor con un programa “estático” en el que los ejercicios no cambian, y otras variables (métodos, esquemas de cargas e intervalos de descanso) cambian solo gradualmente. Un buen ejemplo sería el sistema 5/3/1 de Jim Wendler.

Tienen una rspuesta de cortisol más alta al estrés que otras personas debido a su alto nivel de ansiedad. Así que, aunque tienen una capacidad de trabajo alta, hacer demasiado volumen puede de hecho limitar sus ganancias debido a la producción más alta de cortisol.

Dieta
No lo hacen muy bien con una dieta en la que se restrinjan los carbohidratos. Necesitan al menos una pequeña cantidad de carbos en cada comida principal, tanto para bajar los niveles de cortisol como para evitar que la serotonina baje todavía más. Los carbos pre-entreno (para bajar la salida de cortisol) y por la noche (para aumentar la serotonina) son especialmente importantes.

¿Cuál es tu tipo? 

¿Cuál es tu tipo neurológico? ¿Y qué significa cuando se trata de tu plan de entrenamiento y nutrición? Eso es lo que cubrirá el resto de esta serie de artículos. Al final, sabrás exactamente cómo deberías estar entrenando y comiendo para alcanzar tus objetivos.



 Fuente:

http://www.masfuertequeelhierro.com/blog/2017/05/entrenando-conforme-a-tu-personalidad-el-sistema-de-neuro-tipo/


Nota: El enfoque dado al entrenar y lo demás es muy simplista. Veánse los comentarios en el artículo original en el enlace.