viernes, 31 de enero de 2025

7 de los errores más comunes que cometemos a la hora de hablar y escribir en español

 Por Redacción

 HayFestivalCartagena@BBCMundo

 

"Ola ke ase".

Si recibes un mensaje así puedes tener varias cosas por seguro, como que quien lo escribe tiene confianza contigo y que pertenece a la generación millenial.

La frase, que originalmente era parte de un meme con una divertida llama con ojos chuecos, es posiblemente la primera con evidentes errores que se hizo viral.

Y está más o menos claro que, quien la escribe, sabe que hay varias faltas de ortografía —"Hola, ¿qué haces?" sería la frase correcta—.

Pero hay otros errores gramaticales que también son virales, solo que se han colado en nuestro día a día sin ser parte de un meme.

Hablamos con Mónica Helguera, más conocida en redes como "La Profe Mónica", licenciada en Lengua Castellana y que hoy se dedica a la creación de contenido educativo.

Con ella vimos algunos de los errores más comunes que cometemos en español, tanto a la hora de escribir como de hablar.

 

1. El verbo Haber 

Si pudiéramos hacer un ranking de verbos golpeados y vilipendiados por los hispanohablantes, el verbo haber se llevaría el primer premio.

Es uno de los más usados y, tal vez por eso, con el que mayores errores se cometen.

"Tiene una situación muy compleja este verbo. Puede funcionar como principal y como auxiliar y, a la vez, puede acompañar incluso a dos verbos al mismo tiempo".

Esto, sin duda, puede generar mucha confusión.

En primer lugar, haber, como verbo auxiliar, se emplea para formar los tiempos compuestos. Para ello, se combinan todas las formas simples de haber con el participio terminado en -o del verbo que se esté conjugando: ha comprado, hemos querido, había venido.

Aquí viene uno de los primeros errores, que es usar la forma habemos, arcaica, para formar la primera persona del plural.

❌ Habemos visto a tu hermano.

✅ Hemos visto a tu hermano.

 

Su otro uso, como verbo principal es, a la vez, impersonal. Es decir, es un verbo que se emplea generalmente en la tercera persona de singular y, en este caso, denota la presencia o existencia de algo, como en la frase "hay pan".

En este caso, los errores son tratar de hacer una concordancia entre el verbo y el sujeto que no tiene cabida. "Es complejo pensar en que un verbo no se pueda pluralizar, siendo que acompaña a un sujeto en plural, pero en este caso, es un error", apunta Helguera.

❌ Habían varias niñas.

✅ Había varias niñas.

Recientemente se hizo viral otro meme y, en algunos casos, el verbo haber aparecía con este error:

❌ Cuando sea millonaria, no diré nada, pero habrán señales.

✅ Cuando sea millonaria, no diré nada, pero habrá señales.

Con el uso impersonal del verbo haber en presente también aparecen errores en el modo de escribirlo. Se han visto "ay", "hai" o "ahí" donde se escribiría "hay". Una frase clásica que se suele enseñar para diferenciar el cómo suena de cómo se escribe es la siguiente:

Ahí hay un hombre que dice ¡ay!

Ahí - adverbio de lugar.

Hay – la forma impersonal del verbo haber en presente.

¡Ay! – interjección para expresar muchos y diversos ánimos, desde dolor hasta alegría.

El cuarto de los errores con este verbo es quizás el más curioso y bastante repetido y nace por una confusión en la pronunciación. Veamos.

❌ Haber si nos vemos.

✅ A ver si nos vemos.

En este caso, se confunde el verbo auxiliar en infinitivo, haber, con la secuencia constituida por la preposición a y el infinitivo verbal ver.

 

2. Palabras Homófonas 

¿Qué son palabras homófonas? Pues que se pronuncian igual, pero se escriben diferente.

Y aquí empiezan grandes confusiones que llevan a errores, por ejemplo:

La confusión entre as/has/haz.. Y sí, aquí tenemos otra vez un ejemplo que incluye al verbo haber.

¿Has buscado a ese as del fútbol? Búscalo. Haz lo que te digo.

Has - forma correspondiente a la segunda persona del singular del presente de indicativo del verbo haber.

As – uno de las cartas de la baraja o una persona que sobresale de manera notable.

Haz - forma de imperativo correspondiente al pronombre tú del verbo hacer.

"Sobre todo en la diferencia entre has y haz, siempre trato de explicarlo del modo más sencillo para que la gente lo entienda. Y suelo hacerlo pidiendo a la gente que se fije en el participio. Si hay una palabra que sigue a ese 'has' o 'haz' y se observa que termina en ado, ido, to, so y cho (como en borrado, comido, roto, impreso y dicho), me va a indicar que la palabra previa es has (has dormido, has comido, has roto, has impreso, has dicho)", señala Mónica Helguera.

Otro modo de distinguir entre has y haz es ver que este último indica una orden.

Otras palabras que suelen confundirse porque suenan igual son vaya, baya y valla.

Vaya para la valla a recolectar bayas.

Vaya – Tercera persona del imperativo del verbo ir.

Valla – Cercado o muro.

Bayas – Un tipo de fruto.

 

Otro ejemplo de palabras homófonas son allá, haya, halla y aya.

Halla este detalle: allá, al lado del árbol, que es una haya, están los niños con su aya.

Halla – Segunda persona del singular del presente del verbo hallar, que significa encontrar.

Allá – Adverbio demostrativo que lugar.

Haya – Un tipo de árbol.

Aya – Persona encargada de cuidar niños.

Otro problema con la palabras homófonas son aquellas que van con v o con b, sonidos ambos que cada vez menos personas hispanohablantes distinguen al pronunciarlos, pero que en origen son diferentes: la primera es labiodental y la segunda, bilabial.

"No se acostumbra a diferenciar la b de la v por pronunciación. Entonces, hay palabras que pueden ser complejas y se cometen errores al escribir, por ejemplo entre bello (hermoso) y vello (pelo), hierba (planta pequeña) o hierva (del verbo hervir); botar (de titar algo a la basura o dar saltos) y votar (emitir un voto)”, explica Helguera.

 

3.  Un caso especial de homofonía: la z, la c y la s

“En España hay algo particular y es que, el que exista la pronunciación de la z ayuda muchísimo”, dice Helguera.

Con excepción de las Islas Canarias, algunas zonas de Andalucía y Extremadura, en España se hace una distinción clara entre el sonido z y s.

No ocurre así en América Latina. Y, claro, esto a veces lleva a confusión cuando escribimos y podemos confundir dos sonidos (z y s) con tres grafías distintas: z, s y c.

 

❌Peresa

✅ Pereza

❌Sapato

✅ Zapato

❌Pes / Pesesito

✅ Pez / Pececito

“No, no es fácil. Yo entiendo la complejidad de esta norma y de lo complicado de aplicarla. Pero, para escribirlo de modo correcto, toca eso, mirar la norma”, apunta.

Aquí puedes revisar las reglas de la Real Academia de la Lengua para saber cuándo escribir s, z o c.

 

4.  Una "s" que se cuela donde no va...

Si eres de quienes dice: "¿Comistes paella?" o entona la canción de Gilda así: "Fuistes mi vida, fuistes mi pasión; Fuistes mi sueño, mi mejor canción; Todo eso, fuistes, pero perdistes", que sepas que andas metiendo una "s" de más.

Y es un error muy común.

La segunda persona del singular (tú) del pretérito perfecto simple del indicativo (fuiste, hiciste, comiste, perdiste, caíste, viste, metiste, etc.) nunca termina en -s.

El problema es que suele confundirse porque en casi todas conjugaciones y tiempos verbales, la segunda persona del singular sí termina en s, como en comes, comías, comerás, comerías, comieras.

 


5. Por qué, porque, por qué, por que

Es muy común confundir tantos porqués y acabar escribiendo junto lo que va separado y al revés.

“Para poder enseñar esto a alguien, sus diferencias y cómo escribirlos correctamente, es importante saber cómo se usa cada uno de ellos”, explica la Profe Mónica.

 

Por qué

Introduce oraciones interrogativas y exclamativas, tanto directas como indirectas:

¿Por qué te comiste mi arepa?

No comprendo por qué te comiste mi arepa.

No sabía por qué dejó de hablarme.

¡Por qué calles más bonitas pasamos!

Por que

Puede, por un lado, ser la preposición por + el pronombre relativo que.

Este es el motivo por (el) que te llamé.

Y, por otro, la preposición por + la conjunción subordinante que.

Al final optaron por que no se presentase.

Están ansiosos por que empecemos a trabajar en el proyecto.

Porque

Puede usarse con dos valores para introducir oraciones subordinadas que expresan causa. En este caso, un truco para saber si se escribe así, es que podemos sustituirlo por “puesto que” o “ya que”.

Me comí la arepa porque tenía ganas.

También se emplea como encabezamiento de las respuestas a las preguntas introducidas por la secuencia por qué:

—¿Por qué te comiste mi arepa? —Porque tenía ganas.

Porqué

Es un sustantivo masculino que significa ‘causa, motivo o razón’ y se escribe con tilde por ser palabra aguda terminada en vocal.

No comprendo el porqué de tu actitud [= la razón de tu actitud].

Todo tiene su porqué [= su causa o su motivo].

 

6. Signos de Puntuación 

De más o de menos, los signos de puntuación son otros de los grandes vituperados en la lengua española.

“He visto letreros que dicen ¡¡¡¡¡¡Gratis!!!!!! Con montón de signos de exclamación, como para ser más expresivo. Y no es necesario. Lo correcto es uno que cierra y otro que abre, aunque a veces pueden ponerse tres. No hay manera de expresar más con más de 3 signos de admiración. Tampoco con tantos signos de interrogación”, explica Mónica Helguera.

“También observo en general un miedo al punto y un amor por la coma. No es “buenas tardes a todos, cómo están, vengo a presentarles mi libro de ortografía”. Sería Buenas tardes a todos. ¿Cómo están? Vengo a presentarles mi libro de ortografía”.

¿Un truco para saber cuándo poner una coma o un punto? La entonación. Si suena a idea que ya finaliza, punto. Si la continuamos, una coma.

 

7. Un caso especial en la puntuación: la coma del vocativo 

De todas las grafías de puntuación, quizás la más denostada, casi absolutamente olvidada, es la coma del vocativo.

"Es la coma más compleja, yo creo. Se llama vocativa porque hace alusión a un llamado al sujeto", explica la profesora Helguera.

¿Cómo podemos distinguirla y ponerla?

“Si yo voy a decir algo sobre María, no pongo coma. En cambio, si yo le digo algo a María, ahí pongo coma”.

Veamos.

María barre – Digo que María está barriendo.

María, barre – Le digo a María que se ponga a barrer.

También se usa cuando saludamos o nos dirigimos a alguien:

Buenos días, Carlos.

Feliz cumpleaños, Ana María.

Mis condolencias, Antonia.

Y, como el chiste que circula en internet, es una coma que puede salvar vidas, porque no es igual decir

Es hora de comer niños - El menú son los niños.

Es hora de comer, niños - Se llama a los niños para que vayan a comer. 

 

Fuente: 7 de los errores más comunes en español


Nota: He añadido por razón didáctica algunas negritas y cursivas para que se distingan mejor las palabras homófonas en el texto.

lunes, 27 de enero de 2025

Colección Club Joven Bruguera

Editorial Bruguera
1981-1983

 


1. H.G. Wells. La Guerra de los Mundos
2. Juan Ramón Jiménez. Platero y Yo
3. Rudyard Kipling. El Libros de la Tierras Vírgenes
4. Miguel Ángel Asturias. El Hombre que lo tenía todo todo todo
5. Isaac Asimov. Lucky Starr. Las Lunas de Júpiter
6. Daniel Defoe. Robinson Crusoe
7.John Steinbeck. El poney rojo
8. Julio Verne. El Castillo de los Cárpatos
9. Benito Pérez Galdós. La Guerra de la Independencia
10. Pearl Buck.  El dragón mágico y otros relatos
11. Mark Twain. Las Aventuras de Tom Sawyer
12. William Faulkner. El Árbol de los deseos
13. Alain Fournier. El Gran Meaulnes
14. P.G. Wodehouse. Las disparatadas aventuras de Ukridge
15. Emilio Salgari. El Corsario Negro
16. G.K. Chesterton. El Napoleón de Nothing Hill
17. Arthur Conan Doyle. El Misterio del Valle de Boscombe y otras aventuras de Sherlock Holmes
18. Jack London. Colmillo Blanco/La Llamada de la Selva (La Llamada de lo Salvaje)
19. H.G. Wells. El Hombre Invisible
20. Charles Dickens. Aventuras de Oliver Twist
21. Jerome K. Jerome. Tres hombres en una barca
22. Anton Chéjov. Mi Vida
23. Julio Verne. Las Indias Negras
24. Ernest Hemingway. La Mariposa y el tanque
25. H. Rider Haggard. Las Minas del Rey Salomón
26. Rudyard Kipling. El Segundo Libro de las Tierras Vírgenes
27. Alexandr S. Pushkin. La hija del Capitán
28. Anónimo. Simbad el Marino y otros cuentos de las Mil y Una Noches
29. Robert L. Stevenson. El Extraño Caso del Dr. Jeckyll y Mr. Hyde
30. Isaac Bashevis Singer. Un Día de Placer
31. Alphonse Daudet. Tartarín de Tarascón/Tartarín en los Alpes
32. Fedor Dostoievski. Pobres Gentes
33. Edgar Allan Poe. Aventuras de Arthur Gordon Pym
34. Stanislaw Lem. Fábulas de Robots
35. P.G. Wodehouse. Mal Tiempo
36. Mary Shelley. Frankenstein
37. Karel Čapek. La guerra de las salamandras
38. Julio Verne. Cinco Semanas en Globo
39. Washington Irving. Cuentos de La Alhambra
40. Allan Sillitoe. La soledad del corredor de fondo
41. Ivan Turguéniev. Primer Amor/Humo
42. H.G. Wells. La Máquina del Tiempo
43. Jerome K. Jerome. Tres ingleses en Alemania
44. Rudyard Kipling. Puck, el de la colina Pook
45. Alphonse Daudet. Cuentos del Lunes
46. Isaac Asimov. Lucky Starr. El Gran Sol de Mercurio
47. Mark Twain. Las Aventuras de Huckleberry Finn
48. Gerald Durrell. Filetes de Lenguado
49. Alejandro Dumas (padre). El Tulipán Negro
50. Máximo Gorki. Días de Infancia
51. Julio Verne. De la Tierra la Luna/Alrededor de la Luna
52. Erich Maria Remarque. Sin Novedad en el Frente
53. Erckmann-Chatrian. El amigo Fritz
54. Rudyard Kipling. Stalky & Co.
55. Louis Pergaud. La guerra de los botones
56. James Fenimore Cooper. El Último Mohicano
47. Honoré de Balzac. Viaje de un león africano a París
58. Pedro Antonio de Alarcón. El clavo y otros relatos
59. T.H. White. El Libro de Merlín
60. Herman Melville. Benito Cereno
61. Anton Chéjov. La cerilla sueca y otros cuentos
62.E. Bulwer Lytton. Los Últimos Días de Pompeya
63. Oliver Goldsmith. El Vicario de Wakefield
64. Fedor Dostoievski. Noches Blancas
65. Oscar Wilde. El Fantasma de Canterville
66. Victor Borisovic Shklovski. Marco Polo
67. Armando Palacio Váldes. El Crimen de la Calle de la Perseguida
68. Isaac Asimov. Lucky Starr. El Ranger del Espacio
69. Dashiell Hammett. El asesinato de las criadas chinas
70. Charles Lamb. Cuentos basados en el teatro de Shakespeare
71. Varios autores (E.A. Poe et al). Relatos de miedo
72. Voltaire. La Princesa de Babilonia
73. Gottfried August Bürger. Las aventuras del barón de Münchhausen
74. Daniel Defoe. Nuevas Aventuras de Robinson Crusoe
75. Frances Hodgson Burnett. El pequeño lord Fauntleroy
76.Fedric Brown. El Ratón estelar
77. Harriet Beecher Stowe. La Cabaña del tío Tom
78. Robert L. Stevenson. Aventuras de un cadáver
79. Miaguel de Cervantes Saavedra. Rinconete y Cortadillo
80. Joseph Conrad. El Duelo
81. Mark Twain. El Príncipe y el Mendigo
82. Pierre Loti. Pescador de Islandia
83. Gustavo Adolfo Bécquer. Leyendas
84. José María Sánchez Silva. Marcelino pan y vino
85. Walter Scott. El enano negro
86. Guy de Maupassant. Historias dulces y amargas
87. Stephen Crane. La Roja Insignia del Valor    
88. Alejandro Dumas (padre). Historias Fantásticas
89. William Shakespeare. Romeo y Julieta/Hamlet
90. O. Henry. La Voz de la Ciudad
91. Mark Twain. El niño malo y el niño bueno
92. Daniel Defoe. Avery, el pirata afortunado
93. Isaac Asimov. Lucky Starr. Los Océanos de Venus
94. Emilio Salgari. Los cuentos marinos de mastro Catrame
95. Louisa M. Alcott. Mujercitas
96. Carlo Collodi. Las aventuras de Pinocho
97. H.G. Wells. La Isla del Doctor Moreau
98. Eugene Le Roy. Jacquou, el rebelde
99. Francis Bret Harte. Un pobre Hombre
100. Bernardin de Saint Pierre. Pablo y Virginia



jueves, 23 de enero de 2025

Cuándo se inventó el dinero y en qué momento el dólar se convirtió en la principal moneda del mundo

Cecilia Barría

BBC News Mundo

 

La historia del dinero es apasionante. Desde hace miles de años no solo ha servido como medio de pago y depósito de riqueza.

También ha sido una unidad de cuenta, es decir, un sistema que nos permite fijar precios y registrar deudas.

El origen del dinero es tan controvertido como su definición. Arqueólogos, historiadores, filósofos y economistas tienen sus propias teorías sobre el misterioso salto que dimos los humanos cuando desarrollamos los primeros sistemas comerciales nacidos después del trueque.

Podemos encontrar el origen del dinero en las transacciones que hace miles de años se hacían con cereales, gramos de plata, objetos de arcilla, conchitas de mar o semillas de cacao, hasta llegar a las monedas de metal acuñadas oficialmente por reyes en el antiguo Irak.

Mucho más tarde surgieron los primeros billetes de papel en China, creados cuando las monedas pesaban tanto que cargarlas era una pesadilla.

Y recientemente, hace apenas 70 años, en secretas negociaciones políticas hasta altas horas de la noche en un hotel perdido en medio de unas montañas, un billete verde llamado dólar llegó a imponerse como la moneda más poderosa del mundo.

En BBC Mundo te contamos la historia del nacimiento y la evolución del dinero, una clave esencial para entender cómo han cambiado a través de los años las transacciones comerciales que han marcado el desarrollo de la humanidad.

 

Las transacciones comerciales de los sumerios

Si pensamos en el dinero como algo material que nos permite hacer transacciones, algunos expertos argumentan que su origen se puede encontrar en los gramos de plata o la cebada, un cereal con el que los sumerios en Mesopotamia (actualmente Irak) comerciaban hace unos 5.000 años.

 
Utilizando la escritura cuneiforme los sumerios dejaton un valioso registro de su civilización.

 

Esos productos que, por un lado, tenían un valor en sí mismo, también servían como una unidad de medida y se utilizaban para cuantificar el valor de otras cosas a través de su peso, como por ejemplo, el valor de un esclavo, del trabajo, los intereses de una deuda y hasta las promesas de pago.

Algunos trabajadores recibían su salario en cantidades fijas de cosas como cerveza o muebles, cuenta Jon Taylor, curador de las colecciones cuneiformes y sellos cilíndricos del Departamento de Medio Oriente del Museo Británico.

También era común que las materias primas tuviesen un valor al ser comparadas entre sí. La lana y los dátiles, por ejemplo, podían tener un valor equivalente en gramos de plata.

Incluso "los comerciantes que hacían operaciones a larga distancia se ofrecían unos a otros una especie de crédito, mediante el cual podían retirar recursos en un lugar y devolverlos en otro, o transferir el derecho a los recursos a otra persona", agrega.

"Si esto constituye moneda o dinero es un tema debatido".

 

Los préstamos con intereses

Todo depende de cómo definimos los conceptos. El director de campo del Proyecto Ur del Museo de Arqueología y Antropología de la Universidad de Pennsylvania, Estados Unidos, William B. Hafford, argumenta que el dinero es "un intento de cuantificar el valor", mientras que la moneda "es una forma física de dinero, un artículo estandarizado".

Desde ese punto de vista, la cebada y la plata eran formas de moneda y, probablemente, el tipo más antiguo de dinero físico conocido hasta ahora.

Ahora bien, dice el experto, la raíz del dinero está en las transacciones de crédito-deuda que existían en la antigua Mesopotamia.

Hafford ha trabajado por años en excavaciones en la zona donde estaba emplazada Ur, una de las más importantes ciudades-estado de Sumeria en Mesopotamia.

Ur fue una de las más importantes ciudades-estado de Sumeria en Mesopotamia

 

Estas transacciones estaban basadas en que una persona podía obtener algo de otra, prometiéndole una cosa a cambio en el futuro. Surge así el concepto de deuda.

Entonces, esa forma de intercambio que primero surgió en comunidades pequeñas, luego se desarrollaría en comunidades más grandes, hasta que, con el paso del tiempo, la deuda termina cuantificándose cuando se inventa la escritura, señala el experto.

"Tenemos muchas tablillas de préstamos y deudas en la antigua Mesopotamia. Por lo general, también tienen intereses", agrega.

El Código de Hammurabi, por ejemplo, establece que la tasa de interés sobre la plata es del 20% y la del grano es del 33%.

 

El peso de la plata

La plata fue la forma más común en que se cuantificó el valor de la mayoría de las cosas durante gran parte de la historia de Mesopotamia.

"A menudo encontramos tesoros de plata enterrados debajo de los pisos para protegerlos. Estos contienen trozos de plata cortados de jarrones, de cuentas viejas, fundidos en lingotes o convertidos en anillos en espiral", explica Hafford.

Los gramos de plata y la cebada se utilizaban como medidas de peso en transacciones comerciales.

 

Los anillos en espiral eran la forma más fácil de transportar el metal, incluso a veces atados al cabello. Una parte de la espiral se podía romper para pesar y pagar las cosas.

El tipo de cambio típico era de 1 siclo de plata (8,4 gramos) por 1 GUR de grano (alrededor de 300 litros). El grano se podía moler hasta convertirlo en harina, un producto esencial para alimentarse.

 

El debate sobre las tablillas mesopotámicas

En algunas tablillas de arcilla de la antigua Mesopotamia quedó el registro de deudas. Según el historiador Niall Ferguson, algunos de esos objetos (más pequeños que el tamaño de una mano) eran en sí mismos una promesa de pago al portador de la tablilla o una especie de orden de compra.

En algunas quedó escrito que, por ejemplo, una deuda de cuatro medidas de cebada debía ser pagada al portador de la tablilla de arcilla, lo que en la práctica, transformaría a ese objeto en un tipo de dinero.

Algunas de las tablillas de arcilla usadas por los sumerios dejaron un registro de los productos de una comunidad o las transacciones comerciales.

 

Según argumenta Eckart Frahm, profesor de Lenguas y Civilizaciones del Cercano Oriente de la Universidad de Yale, los comerciantes mesopotámicos ocasionalmente usaban formas de dinero más "virtuales" que los tradicionales metales.

"Las empresas comerciales a larga distancia de los comerciantes asirios de los siglos XX y XIX a. C., por ejemplo, documentadas por unas 24.000 tablillas de arcilla de la ciudad de Kanesh en el centro de Turquía, incluyen elementos modernos como cheques al portador".

"El pago se hacía a la persona que sostenía el cheque, el cual venía en forma de tableta de Kanesh", apunta.

Pero no todos comparten esa visión del uso de tablillas mesopotámicas como forma de dinero.

Nicholas Postgate, arqueólogo de la Universidad de Cambridge, en Reino Unido, y exdirector de la Escuela de Arqueología Británica en Irak, argumenta que en el contexto de Mesopotamia, las tablillas de arcilla incluían registros de transacciones, pero no se usaban como monedas.

"Lo más cercano que tenemos al dinero, pero mejor decir moneda, es la plata junto con la cebada".

Lo mismo plantean investigadores como Jacob Dahl, profesor de Asiriología en la Facultad de Estudios de Asia y Medio Oriente de la Universidad de Oxford, Reino Unido.

"Las tablillas cuneiformes no funcionaban como dinero. Tenían documentos de préstamo que obviamente podrían valer el dinero prestado y el interés, y en los períodos posteriores de la antigua Babilonia y la antigua Asiria había pagarés", argumenta.

En esa época, agrega, la plata funcionó como un medio de intercambio bastante parecido a lo que podría pensarse como dinero, "pero como nunca estuvo respaldado por un banco central o un Estado, aún no puedes llamarlo dinero".

 

La primera moneda acuñada oficialmente

Las primeras monedas oficialmente acuñadas por un gobierno habrían aparecido alrededor del año 640 a.C. en Anatolia, actualmente Turquía, con el sello del rey Aliates de Lidia.

Esta moneda, el estatero lidio, fabricada comúnmente con una aleación de oro y plata conocida como electro, fue más antigua que las monedas acuñadas en China, India, o en civilizaciones como las de los egipcios, los persas, los griegos o los romanos.

La primera moneda acuñada oficialmente por un gobierno fue el estatero lidio en Anatolia, actualmente Turquía.

 

La acuñación de monedas tuvo éxito por su durabilidad, la facilidad para transportarlas y porque tenían un valor propio.

Al volverse tan eficientes y valiosas, se convirtieron en un instrumento de control político. Facilitaban el cobro de impuestos para mantener a las élites, permitían financiar a los ejércitos y expandir el comercio más allá de las fronteras.

Junto a las monedas siguieron utilizándose otras formas de dinero. De hecho, la palabra salario viene del latín salarium, cuyo origen está en la sal. En la época del Imperio Romano, a los soldados y funcionarios públicos se les pagaba con sal, un producto muy valioso que servía, entre otras cosas, para conservar los alimentos.

Algunas de las monedas antiguas son tan raras como hermosas y, gracias a que se han mantenido en el tiempo, entregan valiosa información a los estudiosos de las civilizaciones previas a nuestra era. Una de ellas es el Tetradracma de plata acuñado en Atenas, hacia el 450 a. C., con una lechuza, emblema de la diosa Atenea.

                                 Tetradracma de Atenas del siglo V a.C.

 

La llegada del billete de papel: el jiaozi chino

¿Y cuándo surgieron los billetes? Durante mucho tiempo, la unidad monetaria básica en China fueron las monedas de cobre o de bronce con una perforación cuadrada en el centro, que les permitía colgarlas en un hilo formando una cadena.

Pero en la medida que los viajes y el comercio fueron expandiéndose, también aumentó aceleradamente la demanda por monedas para realizar las transacciones. Hubo una época en que el cobre comenzó a escasear, pero aún más importante, los gobernantes se dieron cuenta de que era clave mantener el control de las divisas.

Como no querían que sus valiosas monedas se filtraran hacia tierras extranjeras, impusieron una regla: solo se podían usar monedas hechas de hierro.

                                  Monedas acuñadas por la Dinastía Song


 

Pues bueno, las monedas de hierro eran tan pesadas que ni las mulas ni las carretas con bueyes resistían tanta carga cuando había que hacer grandes transacciones.

Imagina que, por un puñado de plata, te daban un saco gigante de monedas de hierro, tan grande como el cuerpo de una persona.

Habrían sido los comerciantes quienes primero comenzaron a experimentar con "instrumentos financieros" de papel para evitar el traslado de grandes cantidades de monedas.

                    El jiaozi chino es considerado como el billete más antiguo de la historia.

Fue durante la dinastía Song, alrededor del año 1.000 de nuestra era, en la provincia de Sichuan, que el imperio emitió oficialmente el primer papel moneda del mundo, el jiaozi, fabricado a partir de la corteza del árbol de la mora.

Desde ese entonces, los mercaderes dejaron de utilizar sus propios pagarés y los gobernantes tomaron el control del sistema convirtiendo al jiaozi en un billete oficial.

Tan oficial como el dólar cuando se convirtió por decreto en la moneda de Estados Unidos en 1792.

 

Las negociaciones que dieron origen a la supremacía del dólar

Cuando la Segunda Guerra Mundial estaba llegando a su fin, los gobiernos aliados se dieron cuenta de que tenían un problema: las economías estaban devastadas y se preguntaban con qué moneda se haría el comercio internacional cuando comenzara la reconstrucción.

Fue entonces cuando los representantes de 44 países se reunieron durante 22 días en julio de 1944 en el hotel Mount Washington, en el pueblo de Bretton Woods, Estados Unidos, a negociar el futuro de las finanzas y el comercio de la posguerra.

Representantes de 44 países se reunieron en Bretton Woods. En el centro, el economista británico John Maynard Keynes.
 
Los países europeos llegaron a la reunión con profundas carencias económicas y Estados Unidos con las mayores reservas de oro del mundo.

Fueron 22 días de reuniones con intensas luchas políticas que se desarrollaban en los salones durante el día y en el bar del hotel "The Moon Room" en la noche, entre whiskies y puros, según cuenta Ed Conway, en su libro "La Cumbre".

 

Dos hombres se enfrentaron en un duelo intelectual casi a muerte: el británico John Maynard Keynes (con su utópica idea de crear una moneda común para todo el mundo llamada "bancor") y el estadounidense Harry Dexter White, del Departamento del Tesoro, quien terminó ganando la batalla.

Al final de Bretton Woods, quedó establecido que el dólar estadounidense sería la moneda para hacer las transacciones internacionales. Y las dos instituciones que se crearon en aquella reunión, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, realizarían préstamos en dólares a los países con problemas económicos tras el fin de la guerra.

Quién se imaginaría en esa época que de las negociaciones hechas en un hotel medio perdido en las montañas, se gestaría la arquitectura de las finanzas inernacionales que persiste hasta nuestros días. 

 

 Fuente: Historia del Dinero

 

 

 

 

 
 

 

 

 

 

martes, 21 de enero de 2025

Los Gallos

Por Federico Elguera

No guardo recuerdo de ciudad, villa o aldea, en la que canten los gallos como cantan en Lima.
Mientras estuve viviendo en el hotel, creí que sólo en ese establecimiento existiría un gallinero para abastecer al restaurante; pero cuando alquilé un departamento y los gallos seguían cantando, me mudé a otro y el canto me perseguía, me di cuenta de que no hay habitante de Lima que no tenga su gallo.
Naturalmente, que me refiero al canto nocturno que interrumpe el sueño y desespera.

ꟷOiga, amigo, dije un día al cobrador de la casa que ocupaba: estoy pensando mudarme, porque los gallos no me dejan dormir.
ꟷEn todas partes le pasará a usted lo mismo, me contestó.
ꟷ¿Pero por qué hay tantos gallos en esta ciudad?
ꟷPorque hay muchas gallinas, me contestó sonriendo.
ꟷ¡Convenido! ¿Pero por qué la pasan cantando toda la noche?
ꟷPorque son muy brutos y se equivocan con la luz. Vea usted, agregó, antes del alumbrado eléctrico sólo en las noches molestaban; pero ahora, todas las horas les parecen de madrugada.
ꟷ¡Maldita luz! Pues deberían apagarla después de la medianoche.
ꟷ¡Eso no es posible!
ꟷ¡O matar a todos los gallos!
ꟷTampoco es posible, porque no habría qué hacer con las gallinas.
ꟷ¡Hombre! ¡Comérselas!
ꟷ¡Ah, no, no! ¡Ya irá usted acostumbrándose!
ꟷ¿Cómo voy a acostumbrarme a vivir en un corral?
ꟷ¡No, señor! En esta finca no hay corral. Aquí sólo viven hombres solos, y los gallos que usted oye son del barrio.
El cobrador tenía razón; pues los gallos que yo oía eran de toda la ciudad.

Principiaba a cantar uno, de voz de chantre, pausada y ronca, que era el más próximo a mi dormitorio. Despertaba a sus conciudadanos y se formaban inmediatamente dúos, tercetos, cuartetos y coros, que no tenían cuándo acabar.
Una persona a quien me quejaba de esto, me dijo:
ꟷFelicítese usted de que ladran menos perros que antes.
ꟷ¿También había eso? ¿Pues en esta ciudad no se podría dormir?
ꟷEn otro tiempo los vecinos tenían que levantarse de sus camas para matar a tiros a los perros.
ꟷ¿Y el Municipio?
ꟷEstá en una esquina de la Plaza ¿No lo conoce usted?
ꟷ¡No es eso! Pregunto si no se ocupa de esas cosas.
ꟷ¡Ah!, ¡sí! ¡sí!
ꟷPero lo que me vuelve loco son los gallos. ¿Por qué no se adopta alguna medida para que no canten en la noche?
ꟷ¿Pero qué podría hacerse?
ꟷObligar a sus dueños a que los hagan dormir en un cajón para que no puedan estirar el pescuezo o meterlos en cuartos oscuros.
ꟷ¡No se sofoque usted, que ya se irá acostumbrando!
ꟷY con la esperanza de acostumbrarse todo se soporta en el Perú.

¿Le pican a usted las pulgas?
¡Paciencia!
¡Ya se irá acostumbrando!
¿No respira usted polvo infecto?
¡Paciencia!
¡Ya se irá acostumbrando!
¿Va usted tranquilo por esas calles de Dios y se da de boca con un grupo de patriotas, que descargan sus revólveres a diestra y siniestra?
¡No se alarme usted, que ya se irá acostumbrando!
¡Desgraciadamente yo no me acostumbro!

Los gallos, las pulgas, el polvo y los tiros me quitan el sueño, me pican, asfixian y excitan mis nervios.
Como buen turista me adapto con facilidad al medio; pero hay cosas, que la verdad, no puedo tolerar.
Todavía no formo un concepto claro del carácter peruano.
¿Ese pueblo es paciente, sufrido y abnegado?
No lo sé, pero al lado de su apatía e indiferencia; es capaz de levantarse en armas y de exponerlo todo, en un momento dado.
¿Será esto mismo consecuencia de su abnegación o prueba de carácter y energía?
Repito que todavía no lo entiendo; pero puedo asegurar que es un pueblo dócil para conducirlo al bien, como fácil para dirigirlo al mal.
El secreto estriba en saberlo mover: en tocarle a tiempo una campanada, en quemarle un cohete, pronunciarle un discurso, reunirlo y capitanearlo.
¡Y seguirá entusiasta y ciego!

En vísperas de una elección de senador me tocó de vecino uno de los candidatos, a quien todas las noches visitaban sus clubes.
El pobre hombre salía a su balcón y, a grandes voces, les soltaba un discurso.
Naturalmente que el discurso no se cambiaba cada noche… ni la gente tampoco.
Unas veces aparecían con el nombre de Club A, otra con el de Club B y así con otros nombres.
Llegaron a grabárseme algunos tipos de esos hombres, y fue enorme mi sorpresa al reconocerlos, un día, en una manifestación en favor del candidato rival de mi vecino.
ꟷ¿Pero que es esto? le pregunté a un amigo que me acompañaba. Si a esta gente la veo todas las noches, en el bando opuesto.
ꟷNo se preocupe usted, me contestó, con gran calma. Si se queda aquí más tiempo, nada de esto le llamará a usted la atención.

¡Ya se irá usted acostumbrando!

(De: El Barón de Keef)



Varios autores. Festival de Lima Edición Antológica. Volumen V Sátira y Humor, Dirección General y Selección: Juan Bromley y Luis Málaga, Concejo Provincial de Lima, Lima, Perú, 1959, págs. 85-88



Federico Elguera nació en Lima en 1860 y falleció en 1928. Fue abogado, político y diplomático. Colaboró en diversas publicaciones con el seudónimo de “Barón de Keef”.  Publicó F + F: Letrillas por Federico Elguera y Federico Blume, Marionetas  y El Barón de Keef en Lima.

Dato tomado de Varios autores, Antología del Cuento. Lima en la Narración Peruana, Presentación y Selección de Elías Taxa Cuádroz, Editorial Continental- Kontinental Verlag,Lima, Perú, 1967
De Elguera puse antes en el blog su relato El Malillero que apareció en la antología citada

lunes, 20 de enero de 2025

¿Cuánto aportan los migrantes indocumentados a la economía de EE.UU.? (y cómo puede afectar una deportación masiva como la que propone Trump)

Cecilia Barría

BBC News Mundo

 

Una de las mayores preocupaciones de los votantes en las últimas elecciones presidenciales en Estados Unidos fue el control migratorio en la frontera de ese país con México.

Tras su contundente victoria electoral, el presidente electo, Donald Trump, confirmó su intención de declarar una emergencia nacional (que le permitiría conseguir recursos adicionales) y utilizar el ejército para implementar su plan de deportación masiva de inmigrantes indocumentados.

Su recién nombrado "zar de la frontera", Tom Homan, ha dicho que los inmigrantes indocumentados que sean considerados como una amenaza a la seguridad nacional o la seguridad pública serán una prioridad, sin ofrecer más detalles.

Y el vicepresidente entrante, JD Vance, ha declarado que las deportaciones podrían comenzar con un millón de personas.

Cuando Trump llegue a la Casa Blanca el 20 de enero de 2025, es posible que inicie de inmediato el proceso de deportaciones como lo ha prometido en innumerables ocasiones.

"Vamos a cerrar la frontera porque ahora mismo tenemos una invasión", dijo el sucesor de Joe Biden.

"Vamos a hacer la mayor operación de deportación en la historia de Estados Unidos".

Según la última estimación del Departamento de Seguridad Nacional, con datos hasta 2022, en Estados Unidos hay 11 millones de indocumentados.

Expertos proyectan que en la actualidad esa cantidad de personas habría aumentado a por lo menos 12 millones.

¿Cuánto aportan a la economía del país?

El debate es intenso porque muchas de las cifras son estimaciones y porque hay poca información reciente.

Algunas investigaciones señalan que los indocumentados aumentan el tamaño de la economía, pagan más en impuestos de lo que reciben en servicios públicos, hacen el trabajo que otros no están dispuestos a hacer y elevan el consumo interno.

En cambio, los partidarios de las deportaciones aseguran que los "sin papeles" les quitan los puestos de trabajo a los estadounidenses, tienen bajos salarios, consumen poco, no pagan impuestos (o pagan muy poco) y son una carga para las redes de asistencia social.

 

¿Quiénes son los indocumentados en Estados Unidos?

De todos los indocumentados que viven en Estados Unidos, unos 3 millones no son "deportables", dado que tienen permiso para vivir y trabajar en el país, según le explica a BBC Mundo Jeffrey Passel, investigador del centro de estudios Pew Research Center.

En ese grupo están aquellas personas que han solicitado asilo, los que se han acogido al Estatus de Protección Temporal (TPS), los que pertenecen al programa de personas llegadas en la infancia (DACA), y aquellos que están en el país con permisos de permanencia temporal conocidos como parole.

Sin embargo, bajo la nueva administración, puede haber cambios que le quiten esa protección a quienes no tienen una residencia permanente.

Como en el último par de años se ha disparado el número de inmigrantes que cruzan la frontera sur, es posible que los indocumentados sean muchos más de lo que señalan las estimaciones.

Sea cual sea su estatus, dice Passel, "lo que sabemos es que contribuyen al aumento del tamaño de la economía".

Gabriela entró a Estados Unidos hace más de dos décadas en el maletero del auto de un contrabandista.

Ahora empleada doméstica en Maryland, la boliviana es una de los millones de indocumentados que viven en el país.

Ella no está preocupada por lo que pueda ocurrir con las deportaciones.

"En realidad, no tengo miedo en absoluto", le dice a la BBC. "Eso es algo de lo que deben preocuparse los criminales. Yo pago impuestos y trabajo".

A otros, en cambio, les preocupa que su familia sea dividida.

Brenda, una dreamer (como se les dice a las personas protegidas por el programa DACA que llegaron a EE.UU. de forma irregular siendo menores) piensa que su marido y su madre podrían ser deportados.

Sus dos hijos nacieron en Estados Unidos y son ciudadanos estadounidenses.

"La idea de estar separados asusta", le explica a la BBC.

Estas son algunas de las contribuciones que hace este grupo de personas que actualmente están en el centro de una batalla política que divide profundamente al país.

 

Mercado laboral 

Según el Pew Research Center los indocumentados representan cerca del 5% de la fuerza laboral en Estados Unidos.

La mayor parte se emplea en labores agrícolas, en la construcción, el servicio doméstico, restaurantes y hotelería.

Nan Wu, directora de investigación del Consejo Americano de Inmigración (AIC, por sus siglas en inglés), una organización que aboga por los derechos de los inmigrantes, dice que hay industrias como la construcción y la agricultura que tienen escasez de mano de obra.

Una deportación masiva complicaría las cosas para los empleadores. "Les haría aún más difícil encontrar suficientes trabajadores", le dice Wu a BBC Mundo.

Probablemente aumentaría los costos de producción, causaría retrasos en los proyectos de construcción y provocaría interrupciones en los servicios, argumenta.

"Haría que los alimentos y la vivienda sean aún menos asequibles en muchas partes del país" y causaría un aumento de la inflación.

Potencialmente los más afectados son los trabajadores agrícolas. Las estimaciones señalan que entre un 40% y un 50% de ellos son indocumentados.

En cuanto a las remuneraciones, varios estudios sostienen que los indocumentados no son realmente una competencia para la mano de obra "con papeles", en la medida que hacen trabajos más riesgosos, mal pagados y que muchos no están dispuestos a realizar.

"No es un juego de suma cero", escribió Chloe East, investigadora no residente del Hamilton Project del centro de estudios Brookings Institution.

La evidencia muestra que no es verdadera la creencia de que cuando un indocumentado ocupa un puesto de trabajo, un estadounidense lo pierde.

 

El pago de impuestos 

¿Cuánto pagan en impuestos los indocumentados?

Según el Instituto de Política Fiscal y Económica (ITEP por sus siglas en inglés), los indocumentados pagaron casi US$97.700 millones en impuestos en 2022.

Lo hicieron, y lo hacen, cada vez que compran un producto o un servicio, cuando arriendan o adquieren una propiedad y cuando pagan tributos sobre la renta personal y empresarial.

Una parte de esos recursos, señala el ITEP, fue destinada al financiamiento de servicios públicos a los que por ley no pueden acceder, como por ejemplo, la seguridad social, el seguro de desempleo, o la mayor parte de los programas de salud para personas en una situación económica precaria.

El Consejo Americano de Inmigración, por otro lado, calcula que en 2022 el pago de impuestos hecho por los indocumentados fue cercano a los US$76.000 millones.

Más allá de las distintas estimaciones sobre la contribución impositiva, lo que está claro es que existe un aporte importante de recursos.

"Una deportación masiva privaría a los gobiernos federales, estatales y locales de miles de millones de dólares en ingresos fiscales", dice Nan Wu.

Sin embargo, los partidarios de las deportaciones argumentan que estas personas son una carga fiscal neta porque reciben más recursos en servicios gubernamentales de lo que pagan en impuestos.

 

Consumo, inflación y crecimiento económico 

Un estudio del Instituto Peterson de Economía Internacional (PIIE, por sus siglas en inglés) plantea que si se concretan los planes de deportación anunciados por Trump (bajo el supuesto de que afecten a 1,3 millones de personas), las consecuencias para el crecimiento económico serían negativas.

Calculan que para el año 2028, el Producto Interno Bruto (PIB) bajaría un 1,2% y disminuirían los puestos de trabajo.

Por otro lado, argumentan, los indocumentados también son consumidores.

"Deportarlos significa menos demanda de alimentos, vivienda, servicios y otras necesidades domésticas", escriben Anjali Bhatt, Megan Hogan, Marcus Noland y Warwick J. McKibbin.

Bajo su perspectiva, "las deportaciones masivas aumentarían los precios, costarían empleos y dañarían la economía estadounidense".

El debate político actual se ha centrado en la llegada de inmigrantes indocumentados en el último par de años.

Poca información hay disponible sobre este período, dado que los estudios disponibles trabajan con datos hasta 2022.

Sin embargo, lo que se conoce oficialmente es que el año pasado hubo un récord de inmigrantes de 2,5 millones que cruzaron la frontera sur, según el Departamento de Seguridad Nacional.

Esas personas solicitan asilo y, mientras esperan durante varios años una respuesta a su solicitud, tienen permiso para vivir y trabajar en Estados Unidos en calidad de indocumentados, contribuyendo a la economía.

Pero "una economía más grande no equivale necesariamente a una mejor economía", dice un artículo del Wall Street Journal.

Economistas han advertido que "se espera que los inmigrantes recientes tengan salarios más bajos y sean menos productivos que sus predecesores", señala la publicación.

Aunque a largo plazo, agrega, podrían tener un efecto positivo al ser más jóvenes que el promedio de la población estadounidense.

Como tienen una vida laboral más extensa, tienden a contribuir más en impuestos de lo que reciben en beneficios.

Cuando Donald Trump llegue a la Casa Blanca en menos de dos meses, se espera que entregue los detalles de su plan de deportación que, como él ha prometido, comenzará desde el primer día que asuma la presidencia.

Mientras, el anuncio de que va a declarar una emergencia nacional y que utilizará al ejército para deportar a los indocumentados resuena en los oídos de quienes pueden verse afectados.

 

Fuente: Migrantes indocumentados

 

Nota.- Este artículo se publicó originalmente en BBC News Mundo el 3 de diciembre de 2024 pero por los datos y circunstancias actuales veo oportuno ponerlo este día.